lunes, 1 de abril de 2013


                             Introduccion al Desarrollo Pre-Natal





                                                       

Desarrollo Prenatal


      LAS ETAPAS DEL DESARROLLO PRENATAL


El desarrollo prenatal ocurre en tres etapas: 

  • la germinal, 
  • la embrionaria 
  • y la fetal. 
Durante estas tres etapas de gestación, el cigoto unicelular original se convierte en un embrión y posteriormente en un feto. 

Tanto antes como después del nacimiento el desarrollo procede de acuerdo con dos principios fundamentales:


-El principio cefalocaudal (del latín "dela cabeza a la cola") establece que el desarrollo avanza desde la cabeza hasta la parte inferior del tronco. 
-El principio proximodixtal (del latín "de cerca a lejos"), el desarrollo avanza desde las partes próximas al centro del cuerpo hacia las distantes.





Etapa germinal (desde la fecundación hasta las dos semanas):


El organismo se divide y se implanta en la pared del útero. El huevo fecundado desciende desde la trompa de Falopio hacia el útero y adquiere la forma de una esfera llena de líquido que se denomina blastocito, algunas células se agrupan en sus bordes y forman el disco embrionario.


A partir de este momento es posible distinguir dos capas: el ectodermo (que formará las uñas, dientes, cabello, órganos sensoriales, la parte exterior de la piel y el sistema nervioso, que incluye el cerebro y la espina dorsal) y el endodermo (que formará el sistema digestivo, hígado, páncreas, glándulas salivales y sistema respiratorio)
Posteriormente se desarrolla una tercera capa que se llama mesodermo,  



Que formara la  parte  interna de  la piel  y  del  esqueleto  y los  sistemas circulatorio  y  excretor 



En esta etapa se originan los órganos de nutrición y protección: la placenta, el cordón umbilical y el saco amniótico.
La placenta está conectada al embrión por medio del cordón umbilical a través del cual le envía oxígeno y alimento, así como elimina el desperdicio del cuerpo del embrión   

El saco amniótico es una membrana llena de líquido que encierra al bebé y lo protege a la vez que le ofrece el espacio suficiente para moverse.




Etapa embrionaria (desde las dos hasta las ocho o las doce semanas):

En esta etapa se desarrollan los principales órganos y sistemas (respiratorio, digestivo y nervioso) del cuerpo humano. 


El embrión es vulnerable a las influencias ambientales, ya que casi todos los defectos congénitos ocurren durante los tres primeros meses de embarazo.

En esta etapa puede ocurrir un aborto espontáneo que es la expulsión del útero de un conceptus (organismo prenatal), que no sobrevive fuera de éste.



Etapa fetal (desde las ocho a las doce semanas hasta el nacimiento)

A las ocho semanas aparecen las primeras células óseas y el embrión comienza a convertirse en feto. 

A partir de ahora y hasta el nacimiento, se dan los últimos cambios al cuerpo, el cual adopta una forma diferente y crece cerca de 20 veces en longitud.

El feto no es pasivo, sino que tiene movimientos, responde a los sonidos y a las vibraciones, y el cerebro continúa su desarrollo.



EL PARTO


Es considerado como la culminación de todo lo que ha ocurrido desde la fecundación hasta el nacimiento hasta los nueve meses de crecimiento en el vientre.
Durante el parto se presentan tres etapas:
Primera etapa:
Es la más larga y dura de 12 a 24 horas en promedio cuando la mujer es primeriza.

Las contracciones uterinas ensanchan la cerviz hasta cuando puede pasar la cabeza del bebé, a este proceso se le llama Dilatación. 


Segunda etapa:
Tiene una duración de hora y media y se inicia cuando la cabeza del bebé inicia su desplazamiento hacia la cerviz, a través del canal vaginal y finaliza cuando el bebé sale por completo del cuerpo de la madre.

Esta etapa termina con el nacimiento del bebé, el cordón umbilical se corta 
y se anuda. 






Últimas investigaciones medica sobre la leche materna

La leche materna favorece el crecimiento de la flora intestinal en los bebés y les protege de infecciones y enfermedades




Investigadores de la Universidad de Duke, en Estados Unidos, han descubierto que la leche materna provoca un crecimiento de la flora intestinal de los bebés diferente al que causan los preparados de leche artificial que hace que sea más recomendable para protegerles de infecciones y enfermedades. En concreto, y según los resultados de un estudio publicado en la revista «Current Nutrition&Food Science», han observado que fomenta la formación de flora microbiótica en el tracto intestinal, lo que permite la absorción de nutrientes y el desarrollo del sistema inmune. «Este estudio es el primero que examina los efectos de la nutrición infantil en la forma en que las bacterias crecen», ha explicado William Parker, autor principal del estudio.
Estudios previos habían demostrado que la leche materna reduce la incidencia de infecciones por diarrea, gripe y enfermedades respiratorias durante la infancia, al tiempo que protege contra el desarrollo posterior de las alergias, la diabetes tipo 1, la esclerosis múltiple y otras enfermedades. Pero, dado que los científicos han ampliado su conocimiento sobre el papel de flora intestinal, trataron de observar si la alimentación de los primeros meses de vida también puede ser beneficiosa para el universo microbiano del intestino. En el estudio, los investigadores de Duke hicieron crecer bacterias en muestras de leche artificial, leche de vaca y leche materna. Para el primer caso, los investigadores utilizaron tres marcas de cada uno de los productos más populares y leche a base de soja, y se compró la leche entera en un supermercado. La leche materna fue donada y procesada para separar diferentes componentes, incluyendo proteínas, grasas e hidratos de carbono. También probaron una forma purificada con un anticuerpo llamado inmunoglobulina A secretora (SIgA) que es abundante en la leche materna y ayuda a establecer el sistema inmunológico de un bebé.